Sebastian Fitzek
380 páginas
Ediciones B
Fitzek vuelve a sorprendernos con esta novela. Con una
narración sencilla pero atrapante nos narra la historia de un matrimonio que ha
adoptado a una niña.
Él es escritor, ha publicado una novela , ”Escuela de
sangre”. Está preparando su nuevo libro y para lo cual
realiza ciertas investigaciones, lo que él no sabe que eso puede ser un peligro
para él mismo.
Una tarde va a retirar de la escuela a su hija y mientras
recibe un llamado urgente donde lo citan en un hospital donde alguien quiere verlo.
La persona que lo cita le advierte sobre el Proyecto Joshua,
le ruega que los próximos días respete
las leyes, que no cometa ningún error. Pero Max es un respetuoso de las leyes,
por lo cual no entiende que significa tanta advertencia.
Los días pasan y una tarde su hija desaparece. En ese
momento su vida cambiara para siempre. No ha quebrado ninguna ley, pero parece
que alguien considera que no ha cumplido
las reglas.
Joshua comienza la búsqueda de su hija por lugares difíciles
para acceder. En ésta búsqueda aparece su hermano, Cosmo, quien estuvo
internado por pedofilia. Max no entiende que hace su hermano y como quiere
ayudarlo. Pero ambos irán siguiendo las pistas que se les presenta.
Es en ese momento cuando conocerá que significa el Proyecto
Joshua. Una propuesta para combatir el delito antes que este suceda.
La lectura de esta apasionante novela nos lleva por esos
sinuosos caminos de la literatura a la cual nos tiene acostumbrado Fitzek, pero
con esos finales que nos hacen pensar en cómo no me di cuenta.
Lo llamativo de este autor es que siempre sus novelas están
relacionadas con un padre y su hijo. Con relaciones conflictivas y rondando el
abuso. Pero siempre los padres no son lo que parecen, sino seres amorosos.
Esta novela no es la excepción.
Mientras la leía pensaba porque el autor siempre nos cuenta
estas historias, y al finalizar el libro es Sebastian Fitzek quien respondió
mis dudas.
En este caso esta novela casi la utilizo como advertencia.
En sus palabras dice que en Alemania tienen grandes problemas con la pedofilia,
por eso él considera que a través de una lectura de ficción puede ayudar a la
gente. Menciona entidades que pueden ser de utilidad.
La novela en si es interesante para leer, atrapa y como
siempre nos permite pensar en que ocurriría si este proyecto se hiciera
realidad.
Nilda
Gallegos Nelson
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